Entramos hoy en el tema de la cantidad de dinero que gastamos innecesariamente y que no nos proporciona ninguna bondad.
Ejemplo claro de ello, es el seguro de vida. Pago inútil por antonomasia y algo pretencioso. Porque parece que al pagarlo eludes la muerte. Que ingenuidad.
De manera que encima que palmas, te estas quitando parte de tu pecunio mensual para que cuando caigas otros disfruten de tu obito. No me jodas. Gástatelo en vida, vino, rameras, ocio, juégatelo en el casino. Todo menos pagar un seguro de vida. Que no te asegura la vida.
Otro caso esperpéntico y hasta de mal gusto, es ir pagando el entierro mes a mes. A esos habría que fusilarlos para que disfrutasen prestos de su tétrica inversión.
¿A que mente podrida se le puede ocurrir estar sacudiendo pasta para el día que la diñe?
Cuando fallezcas que más te da lo que hagan con tu material. Y porque pagar por ello. Al que le moleste tu cadáver o su hedor que te entierre él. Ese dinerito te lo aplicas en jamón de bellota y así tardaras mas en descomponerte la figura.
domingo, 14 de octubre de 2007
ACERCA DE GASTOS ESTOLIDOS Y SUPERFLUOS
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
3 comentarios:
sabias palabras,rec
el que derrocha en vida ahorra en muerte.
cada dia escribes menos,tanta oveja no puede ser bueno
Publicar un comentario